Nuestra visión la debemos cuidar no solo a la hora de salir a pasear y hacer deporte, también cuando estamos en la biblioteca o en casa estudiando debemos preocuparnos porque haya una iluminación correcta y demos el descanso suficiente a nuestros ojos para que no se fatiguen.
Esta serie de consejos son aplicables para cualquier estudiante:
- Escoger un lugar iluminado con luz natural, en su defecto, iluminar de forma indirecta para evitar los reflejos y las sombras que ocasionarían un mayor esfuerzo visual.
- Trabajar a una distancia del papel de 30 ó 40 centímetros, e incluso 50 cm si se trata de pantallas. Si a estas distancias nos cuesta leer probablemente nos venga bien hacer una visita al oftalmólogo para ver si necesitamos gafas graduadas o lentillas.
- Descansar la vista de forma regular, por ejemplo cada media hora es conveniente trabajar la vista de lejos con el objetivo de variar el enfoque. Para ello bastaría con asomarnos a la ventana para ver qué pasa por el vecindario o mirar algún objeto que tengamos al otro lado de la habitación por ejemplo.
Mucho se ha discutido sobre si la miopía es consecuencia de forzar la vista de cerca, sin embargo hoy por no hoy no está demostrado, aunque si se reconoce que no es bueno forzar ni una ni otra durante largos periodos de tiempo.
Hay que entender que nuestro sistema visual no ha tenido tiempo de evolucionar para estos menesteres, su diseño actual está preparado para trabajar en espacios abiertos y distancias largas, con una variedad de movimientos oculares que nos permiten abarcar un gran campo visual.
Por contra, estudiar nos exige un trabajo en espacios cerrados, fijando la vista a corta distancia y con una reducida movilidad ocular, por no hablar del desgaste que ocasiona la concentración y memorización de datos.
En resumen, se trata de consejos sencillos que cualquier puede poner en práctica para cuidar la vista y evitar un desgaste innecesario.
0 comentarios